A petición de su director musical D. Ginés Martínez y de todos los componentes músicos de la A. M. "Ntra. Sra. de la Consolación", se le hizo entrega de un obsequio con todo el cariño de todos ellos y del mío propio, bajo la siguiente dedicatoria:

. . . El castigo que nos da la paz recayó sobre nuestro Señor y por sus heridas fuimos sanados. Esta obra musical fruto de la palpitación melódica de la mayor y más apasionante historia que jamás se ha escrito . . . que es . . . nuestra alma y la exaltación de Ntro. Señor, es dedicada por vivir predispuesto a resignarse con amor a todas las heridas que nos envuelve esta pasión, al presidente de la asociación D. Diego Casado Cruz.

Si una imagen vale más que mil palabras, un vídeo . . .

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